¡Hola familia!

Tras tenerse que posponer la fecha inicial de la convocatoria por su posible repercusión a la Vuelta Ciclista a España, finalmente, el pasado 15 de septiembre 4.000 motoristas se manifestaron en la plaza de las Ventas de Madrid (según de Delegación del Gobierno) para denunciar “la dejadez y ausencia de eficacia» en las administraciones públicas, especialmente la Dirección General de Tráfico (DGT) ante el aumento de la siniestralidad mortal de nuestro colectivo motorista.

Tal y como explicamos en SmartMotoRiders en el post donde anunciábamos la manifestación, se hace muy necesario que se reconozcan los problemas y errores existentes. Las muertes y heridos por accidentes de tráfico siguen aumentando aun y haber tomado cambios legislativos al respecto. Es por ello que es necesario pedir las responsabilidades del poder legislativo con los cambios legales que se adoptaron (la retirada del margen de seguridad de 20 km/h en las maniobras de adelantamiento y la reducción de la velocidad máxima genérica de 100 km/h a 90 km/h en carreteras amplias de más de 9 metros de anchura).

La DGT sigue manteniendo la orden a los Guardias Civiles que pertenecen a la Agrupación de Tráfico de no denunciar los incumplimientos legales por el estado y conservación de carreteras (Instrucción MOV 2023_27 de 21 de diciembre de 2023). De igual forma sigue permitiendo que esa orden permanezca en las normas internas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.

Se hace urgente y necesaria la mejora en la investigación de accidentes de tráfico incorporando el factor vía desde una visión técnica mediante:

– La creación de un protocolo legal y unificado.
– Formación unificada de los agentes.
– Dotación de medidores de rozamiento del firme de rodadura y otros recursos tecnológicos.

Es por ello que desde Unión Internacional en Defensa de los Motociclistas se pide que «se activen las fiscalías de seguridad vial para la persecución de los delitos, en aplicación del artículo 385.2 del Código Penal por no restituir la seguridad vial cuando existe la obligación de hacerlo» y que se entienda la motocicleta como «una solución práctica y de baja incidencia medioambiental a la movilidad de las zonas urbanas».

NOTA: Las fotos usadas en este reportaje tienen © de las personas o entidades mencionadas en ellas.