¡Hola amigos!
En pocos días estaremos disfrutando del que para nosotros -y para muchos- será el primer evento mototurístico del 2020 después de la pandemia por el COVID-19: la Crom Ride. Para llegar en buena forma física, hemos estado «entrenando» estas semanas en las que se ha abierto la movilidad por todo el territorio. Así que en las próximas líneas os contamos lo que dio de sí la jornada de «inspección de pantanos».
¡COMENZAMOS!
Destino #1: Mataró – Berga
Para realizar este entrenamiento las motos elegidas fueron la ya conocida Yamaha FZ6 S2 y, por otro lado, la Honda silver wing . Con ésta elección pretendemos mostrar cómo se puede disfrutar con cualquier montura de esta pasión por las rutas. Así, pues, para llegar a nuestro punto de partida, tomamos una vía rápida, hasta llegar a la zona del Lluçanès donde sí que ya tomamos carreteras secundarias. En algo menos de 90 minutos estábamos repostando y desayunando en Berga para dar inicio a la jornada de entrenamiento para la CromRide.
Destino #2: Berga – Embalse de Sant Ponç
Tomando la carretera C-26 de Aviá a Navés, nos desviamos dirección Linyà para finalmente llegar al embalse de Sant Ponç, situado en el valle medio del río Cardener. Éste fue construido entre los años 1949 a 1957 y forma parte del conjunto de embalses de la cuenca del río Llobregat.
Destino #3: Embalse de Sant Ponç – Embalse de Rialb
Después de dejar atrás la «carreterilla» de Linyà, llegamos a la C-55 donde nos dirigimos en sentido Solsona. Allí, nos desviamos por la C-149 dirección embalse de Rialb. Se notaba que la carretera hacía meses que estaba poco o nada transitada pues la suciedad era evidente. Os recordamos que hay que extremar las precauciones aún más en este tipo de condiciones. Consultando el «parte» meteorológico observamos que a partir de media tarde se nos avecinaba una borrasca en esta zona del pre-Pirineo. Así que no había tiempo para relajarse en demasía.




Destino #4: Embalse de Rialb – Embalse de Oliana
Tras esta breve parada, continuamos en sentido norte por la C-14 para dirigirnos al embalse de Oliana no sin antes hacer una pequeña parada para reponer energía en el entorno de la bonita ermita de Sant Andreu del Castell, una iglesia románico-lombarda del año 1040, que está catalogada como «Bien Cultural de Interés Nacional» desde 1949.
Destino #5: Embalse de Oliana – Embalse de la Llosa del Cavall
Con las energías recuperadas, pudimos seguir afrontando la jornada de «entrenamiento» aunque el calor apretaba fuerte. Tomamos el desvío en el «Pont del espia» para coger la L-401 que nos desembocaría en los pueblecitos de Aliñá y Cambrils para, finalmente, llegar a Sant Llorenç de Morunys después de «curvear» con nuestras monturas los 50 km que cubren el tramo.
Destino #6: Embalse de la Llosa del Cavall – Santuario de Queralt
Penúltimo tramo del recorrido circular que nos habíamos propuesto. Desde el embalse de la Llosa del Cavall seguimos camino a Berga por la LV-4241 / BV-4241 para llegar al Santuario de Queralt. Allí estuvimos poco tiempo porque el cielo cada vez estaba más amenazador. Habrá que volver otro día para disfrutar del complejo histórico.
Destino #7: Santuario de Queralt – Embalse de la Baells
Últimos kilómetros de ruta para plantarnos en el embalse de la Baells ya con la tormenta encima y una buena ventolera acompañada de piedra. Así que nos hicimos la «foto de rigor» y pusimos rumbo a casa para ir capeando el temporal.
Conclusión
Han sido casi 500 km de entrenamiento con dos monturas bien distintas en una jornada de calor acompañada de aguaceros. ¡Con ambas se disfruta! No olvidéis que llevamos muchos meses sin rodar igual y es importante mantenerse hidratados en jornadas de calor así como también hacer estiramientos para prevenir lesiones. Aprovechamos también para recordar que hay que continuar cumpliendo las medidas de seguridad que nos indican las autoridades sanitarias, para evitar que el «bichito» del COVID-19 vuelva a rebrotar. Os esperamos el próximo jueves con nuestra crónica de la CromRide ¡No nos falléis!